Bueno bueno papis a esto ya le
estamos viendo el fin, pero todavía algo nos queda jejeje. La
verdad es que esta mañana no madrugamos en exceso, el gallo de la Caichi fue el
que tocó diana para levantarnos, el p… gallo!! Auténticos copos de maíz con
zumo de vaca nos esperaban para desayunar, pues teníamos que coger
muchiiiiiiisima fuerza para el pedazo de día que nos tenían preparado nuestros
super hiper mega monitores (están como una cabra, por si no os habíais dado
cuenta). Bambas y cantimploras llenas y a completar las innumerables misiones
que teníamos por delante, avisados estáis que si nos vemos en un apuro en el
medio del campo nos mojamos y nos come algún bicho que otro seguro, porque
somos unos auténticos mantas, pero solo para algunas cosas eh! Hasta las
trancas de barro y con pintura hasta en los oídos pasamos por la manguera
infernal de agua llegada desde la mismísima Rabaza para quitarnos toda la roña.
De ahí directos a la piwi, y tiro porque me toca, y punto. Después del hartón
de agua nos esperaba nuestra comida favorita, la inigualable comida de vieja,
que si quieres las comes y si no las dejas, pero nos las comimos, que lo
sepáis. Domin también nos tenía preparados unos palurdos de merluzo para que
llenáramos nuestras panzas, para rematarlo con una sandía fresquíiiisima (ya se
nos van acabando las de la partía del otro día, pronto volveremos a asaltar los
huertos cercanos).
Los campeonatos de la tarde
avanzan según lo previsto, los más astutos ya están a las puertas de las final,
los menos pues se tienen que conformar con el maravilloso juego de ver (mae mía
qué castaña nos entra a esta hora). Acho acho acho que a estos monitores se les
ha ido la pinza, ¿pi no se les ocurre clavarnos un examen sorpresa esta tarde?
La verdad es que los resultados no han sido regulín reguleros, nuestras mentes
están de vacaciones como es de esperar. Sándwich Yorkeso para la merendola con
unos zumitos de pessego, todo ello previo a la mítica gymkana campamentil que
nos esperaba a la sombra de los olivos. Carreras de sacos, patada en el pompis
a los monitores, pelotazos sin probar una gotita de agua con misterio, y un
sinfín de actividades varias que han hecho que pasemos un ratejo moito
divertido. Y por fin la hora de la ducha, la roña no sabía la de agua que se le
venía encima… Uy que hambre mae mia! Panga y tortilla de criadillas con huevos
de anaconda para seguir cebándonos como auténticos gorrinos.
¿Pi el graciosillo de Ángel? Pi
no va y nos dice que nos preparásemos que iba a empezar la noche del miedo? (Tenemos
que reconocer que a más de uno nos ha hecho el culo pisicola), pero vamos, que
era una falsa alarma. Se nos presentaba un cluedo mortífero para nuestros
superiores el cual no hemos tenido lo que había que tener para resolver, así
que na, nos lo tuvieron que chivar. Bueno padres y madres nuestros, os dejamos
que nos vamos a la terraza a ver las estrellas gracias a nuestros amigos de la
Asociación de Astronomía “Vega Estelar” de San Vicente, que nos han traído unos
telescopios chulísimos para que echemos el ratito y veamos más de cerca a los
astros ¡acho acho acho un ovni!. Vengaaaa que mañana es gorda, un besito a
todos!!